- Iniciativas corresponden al Fondo de Innovación para la Competitividad Regional y se espera que tengan un potente impacto en la industria solar fotovoltaica y de almacenamiento térmico.
Dos importantes proyectos en el campo de la energía solar fotovoltaica y el almacenamiento térmico fueron presentadas por el Centro de Desarrollo Energético de la Universidad de Antofagasta, las cuales, recibieron el financiamiento del Fondo de Innovación para la Competitividad Regional, FIC-R, aprobados por el Consejo Regional.
El primer proyecto se denomina “Caracterización territorial de los factores medioambientales que inciden en la elevación de los costos operacionales, disponibilidad y vida útil de tecnologías solares en zonas desérticas de alta radiación”, cuyo director es el doctor Aitor Marzo.
Mientras que el segundo lleva por nombre “Nuevo sistema de descomisionamiento de sales fundidas a altas temperaturas para las plantas con almacenamiento térmico solar”, dirigido por el doctor Mauro Henríquez.
Impacto
El investigador Aitor Marzo, explicó que el proyecto que dirige busca determinar el impacto que tiene un ambiente árido y hostil como el del Desierto de Atacama, en las plantas de generación de energía fotovoltaica. “Factores, como por ejemplo, el polvo que se deposita en los paneles y disminuye la eficiencia del sistema. Por eso, queremos investigar y buscar soluciones tecnológicas para reducir la frecuencia de mantenimiento, y además, aumentar la eficiencia”, explicó.
Este proyecto tiene 360 millones de pesos de financiamiento para un periodo de 2 años de ejecución.
Por su parte, el doctor Mauro Henríquez, destacó que su iniciativa apunta al área del Almacenamiento Térmico -la cual no está muy desarrollada en Chile-, sostuvo. “Usamos sales fundidas a altas temperaturas para almacenar la energía que se produce durante el día, y así, entregarla de noche, asegurando así la continuidad del sistema de producción.
“Las sales que usamos son nitrato de potasio y de sodio, ambas muy abundantes en el desierto. No competimos con la energía fotovoltaica, sino que aspiramos a complementarnos. Nuestra investigación se orienta a mejorar las mezclas de esas sales, para aumentar su capacidad de almacenar el calor”, explicó.
Este proyecto cuenta con 330 millones de pesos para su desarrollo en un plazo de 2 años de ejecución.
Durante el desarrollo de los ambos proyectos, se realizará una constante transferencia tecnológica a la industria por medio de encuentros, seminarios y visitas técnicas. Se debe destacar además, que junto a los investigadores, trabajarán estudiantes tesistas de los últimos años de las carreras del área de ingeniería de la UA.
Referente
A juicio del decano de la Facultad de Ingeniería de la UA, Marcos Crutchik, estos proyectos así como los otros que realiza el CDEA, entre ellos ATAMOSTEC, permitirán a Chile” no sólo ser un gran consumidor de la tecnología solar, sino que dar el paso histórico para comenzar a producirla y exportarla”.
Destacó además el cambio de paradigma que significan estos proyectos, pues “tuvimos que cambiar el foco de sólo crear conocimiento publicable en revistas científicas, a generar vinculación con el mundo privado y público, y en lo posible, sumarnos a empresas y consorcios en el ámbito del desarrollo tecnológico y la investigación aplicada”, finalizó.
Durante la jornada, también expuso la charla denominada “Industria energética regional y su encadenamiento productivo”, el gerente del PTI de Energía, Cristián Sepúlveda Farfán.
La presentación de ambos proyectos concitó la atención de representantes de los sectores gubernamental, empresarial y académico, destacando la presencia de estudiantes tanto de pre como de postgrado.